sábado, 14 de marzo de 2009

El anciano, el refresco y la felicidad


Sé que lo de hoy no va a agradar al personal, encantado como está con el anuncio ese del mundialmente conocido refresco de cola. Sí, ese en el que un anciano paisano mío de 102 años va a visitar a una recién nacida y le suelta un montón de frases huecas y estereotipadas sobre el tiempo, la vida, la felicidad y otras cosas. Quiero pensar que eso es cosa de los guionistas, porque si de verdad ha salido del señor en cuestión, empezaré a temer por su integridad mental. Lo más triste es que parece que a la gente le gusta y piensa así.

Vamos a ver. Se trata de un anuncio, así que el fin último de todo eso es comercial: vendernos un refresco. Refresco que, dada su popularidad e implantación en el mundo, no necesitaría más publicidad, por lo que ha de apelar a ese sentimentalismo new-age tan en boga últimamente, como si de él dependiera nuestra felicidad (no olvidemos que durante un tiempo, los publicistas nos lo vendieron como "la chispa de la vida"). Aderezan la cosa con una música emotiva, un bebé (los muy puñeteros saben que así nos ablandan más) y un entrañable abuelo, y con ello hacen el cóctel en el que nos deslizan esos pseudomensajes que tanto calan.

Señores publicistas: yo no estoy aquí para ser feliz, sino para vivir. Quedarme con lo bueno representa tirar a la basura lo malo, y como el tiempo es escaso y la vida corta, mejor no andar racaneando con lo que nos ha tocado en suerte (porque podríamos llevarnos la triste sorpresa de que, todo lo bueno junto sea más bien poco, eso sin contar lo agridulce, que tanto tiene de bueno como de malo).

En fin, que intento no ver el anuncio de marras, porque hace que me hierva la sangre, y como hay que ser feliz...

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Pues a mi me pasaron dos cosas ...la primera vez que lo vi,solo lo vi,no pude oirlo rodeada de niños medio asalvajados como estaba.He de confesar,medio avergonzada que casi lloro.Y es que las imagenes por si solas tienen una ternura inmensa. Otra cosa fue cuando lo vi por segunda vez y lo pude escuchar...Pues eso, esperas que tan entrañable anciano diga algo y te quedas esperando.Todo guion y de los malos.Otra chispa de la vida para estimular el consumo de "cacacola"
Poner como prioridad la busqueda de la felicidad es una tara de esta sociedad y la mejor manera de labrarte una vida llena de fustraciones,pero vende lo que no esta escrito y los publicistas seran malos pero saben hacer y muy bien su trabajo. Esta el personal como abducido con el anuncio de marras jeje.Mas que triste yo lo veo muy gracioso. Son como niños...se conforman con nada.
Ana.

El Pez Martillo dijo...

Que el anuncio sea bonito y emocione no aporta ni quita nada a lo que en él se dice. Ahí reside parte del engaño, en hacer que, al gustar estéticamente, parezca que está diciendo grandes verdades, que si las piensas un poco, son auténticas estupideces. Y lo peor es que no es el único anuncio. Empiezo a pensar que los guiones los escriben Bucay, Coelho y cía...

Por lo demás, me alegra ver que no soy el único al que le provoca cierta urticaria y vergüenza ajena el anuncio en cuestión. Aunque lo que yo buscaba era provocar al personal y recibir miles de comentarios llenos de insultos y descalificaciones, jajajaj.

Saludos.

Anónimo dijo...

Jajaja pues mira que lo siento por ti. Hoy me has pillado que parece me sobra la serontonina y tengo un dia super gracioso.Brad Pitt en mi cama hoy no me provocaria mas que un ataque de risa jeje. Un dia tonto,vamos.
Saludos.Ana

Zeppitsu dijo...

Asco es lo único que puedo decir.

Cada vez que veo empezar ese anuncio cambio de canal. Ya vaticinaba algo tan inmensamente ridículo e ínfimo cuando nos hicieron tragarnos desde varios días antes esos vomitivos preludios.

Y es que parece que quieren hacer de la felicidad un ortodoxo e ineluctable pastiche de sensiblerías triviales y evidentes.

Emético y absurdo, hilarante e inmenso.

El Pez Martillo dijo...

¿Día tonto? Será cosa del polen y la primavera. Si yo te contara el pavazo que hemos tenido esta noche pasada en el curro...

Zeppitsu, garcias por el comentario. Me sigo sorprendiendo de que nadie monte en cólera. Supongo que nos toman por imposible o por raros y no dicen nada (ya se sabe, a los locos la razón...). al menos sirve de desahogo a los que aborrecemos esa publicidad.

Aquí la cosa es muy cargante, puesto que al ser el señor de la isla, lo hemos de ver, además de en el anuncio, en otros sitios (hasta en los noticiarios).

Con este anuncio han superado en ñoñez y gilipollez a los de compresas. Cosas veredes, amigo Sancho.

Zeppitsu dijo...

Jaja, jodidos anuncios de compresas!

Yo, sinceramente, el día que vea que un anuncio supera el grado de asco que siento al ver los de Kinder Sorpresa me inmolo.

A seguir dándole duro, que se pudran esos seres de carne y hueso; inteligentes y todo eso.

Saludos :)

Lalo Tacuave dijo...

Yo ME crie casi sin Coca cola... en Venezuel solo existia Pepsi.

Ademas las bebidas cola a mi no me gustan.
De las bebidas colas solo la COCA ME PRODUCE ... ARDOR DE ENCIA.