miércoles, 24 de febrero de 2010

Leyendo el diario


Lo reconozco: consulto la prensa. La de todas las tendencias. Más allá de la información útil: cartelera, programación de tv, esquelas y clasificados. Pero no por mantenerme informado (algo imposible), sino para jugar a ver dónde y en qué mienten o no dicen toda la verdad. De este modo, los periódicos se leen de otra manera, más lúcida, más consciente, más ciudadana.

1 comentario:

PENSADORA dijo...

Fíjese, yo soy poco de leer prensa, de ninguna clase.

Pienso que estamos en una época en la que se está cometiendo un exceso de información que nos empieza a deshumanizar.

Sí le diré que alguna vez me pica la curiosidad y abro algún periódico. En ese caso, sólo repaso los titulares y, si alguno me llama especialmente la atención, entonces leo el artículo. Pero por encima, dándole la importancia justa.

Salud y orujo pues!