lunes, 2 de octubre de 2006

Bucles


Hay lugares que parecen estar atrapados en un bucle temporal. En los que siempre que se pasa, ocurre algo que, aunque con diferencias, siempre es igual. Hay en mi ciudad unos cuantos de esos sitios, y siempre que voy por allí me ocurre lo mismo. Suele pasar cuando estoy en movimiento, paseando o en el coche. Me refiero a esos estrechamientos de calle en los que siempre te toca delante la señora con andador, o la pareja de viejecitos que ocupan todo el ancho de la acera y no dejan ningún hueco para pasar, o el turista que ha observado algún extraño detalle en una fchada y se para en seco, embobado a fotografiarlo. Eso cuando voy a pie. Si voy en coche no es muy distinto. Siempre tengo que ponerme en el carril que va más saturado y atascado. Y no importa que en el de al lado no haya nadie, porque si me cambio, entonces empieza a ir cargado. O el punto de las avenidas, más o menos a la altura de la calle General Riera (ya sé que no os importan los nombres de calles y demás, pero es para dejar constancia de la existencia de uno de esos sitios), donde pase lo que pase y a la hora que pase, siempre el tráfico se enlentece (a pesar de ser uno de los tramos más anchos de las avenidas).

Cada vez que llego a uno de estos puntos siento temor. Porque es inevitable que ocurra algo. Y siempre es algo que me etorpece (ahora mismo no me viene ningún lugar a la memoria que tenga una recurrencia positiva, salvo, tal vez, esa esquina donde siempre me encuentro a alguien conocido). Y siempre, siempre, siento un ligero estupor, y supongo que mi cara lo refleja. Me pregunto si realmente hay algo así como grumos temporales. ¿No os pasa lo mismo a vosotros?.

1 comentario:

Cvalda dijo...

Mi mejor amigo y yo pensamos que existe un bucle infinito en el que están todos los objetos que hemos ido perdiendo a lo largo de los años: una bufanda, un móvil, unas gafas...:)