jueves, 18 de febrero de 2016

De los nuevos jóvenes

Un rasgo que veo en las nuevas generaciones es la total falta de conocimiento respecto a lo anterior a ellos. Todo lo que vino antes les es o desconocido o simplemente no les interesa. Como si ellos fueran los primeros. Obviamente, la juventud ha de hacer su camino y tener sus propias vías de expresión, y no ha de constreñirse a lo que los anquilosados les digamos. Eso ha sido así siempre. Pero creo no estar demasiado equivocado al afirmar que antes conocíamos mejor a nuestros padres y lo que a ellos les motivaba y estimulaba. Y nuestros padres lo supieron de los suyos. Incluso hemos degustado lo que nuestros abuelos apreciaban, aunque ya no fuera exactamente nuestro mundo. 

Siempre ha habido brecha entre los jóvenes y los mayores, pero tengo la sensación de que ahora es mucho mayor, que mi mundo, que engloba muchas cosas de los inmediatamente anteriores, ya no es el suyo, que la comunicación es imposible. Tal vez es que me haga viejo y empiece ya con eso tan antiguo (Platón ya lo hacía decir a uno de los personajes de sus diálogos) de que los jóvenes no respetan nada.  

Dijo Newton que si logró ver más lejos que los demás es porque se subió a hombros de gigantes (refiriéndose a otros científicos del pasado). Tengo la sensación de que los nuevos jóvenes creen que ven muy lejos sin necesitar subirse a nada, lo cual les empequeñece.